Uno de los problemas sexuales que han puesto en jaque a la ciencia no es sólo la disfunción eréctil que afecta a millones de hombres alrededor del mundo, sino la eyaculación prematura, descrita como la incapacidad masculina de mantener la fase de meseta en la excitación el tiempo necesario para poder complacer a su pareja. Es decir, llegar al orgasmo antes o inmediatamente después del coito.
Afortunadamente, en México se ha desarrollado un tratamiento que promete hacer de ese problema sexual algo del pasado. Cronadyn es su nombre, fármaco que inhibe la recaptura de serotonina, lo que restablece la neurotransmisión y retrasa el efecto eyaculatorio. Experimentos revelan que los hombres a los que se les suministraron hasta 20 miligramos del medicamento durante doce semanas lograron retrasar su eyaculación de un minuto hasta casi diez. La administración debe ser estrictamente indicada y monitoreada por un especialista. Consulte siempre a su médico.
Una Esperanza contra la leucemia mieloide crónica
Hace algunos años hablar de leucemia mieloide crónica era sinónimo de muerte segura o de tratamientos costosos, dolorosos e invasivos como el trasplante de médula que sólo es posible en 40% de pacientes debido a la falta de donadores compatibles. El campo de la medicina ha obtenido logros que permiten tratamientos, si bien costosos, efectivos que actúan sobre el desajuste del cromosoma Filadelfia, causante de este padecimiento maligno en la sangre y la médula ósea.
Hoy en día es posible controlar esa enfermedad como se hace con la diabetes o la hipertensión arterial dice Jorge Eduardo Cortés, vicepresidente de Cáncer MD Anderson, de la Universidad de Texas. La enfermedad caracterizada por el exceso de producción de glóbulos blancos en la sangre afecta a más de siete mil mexicanos. La edad de mayor riesgo se encuentra entre los 35 y 55 años. El medicamento que hace posible revolucionar su tratamiento e ingresar a una “época molecular” recibe el nombre de mesilato de imatinib. Después de seis meses de tratamiento los enfermos ya no presentan el cromosoma de Filadelfia, lo que brinda nuevas esperanzas de vida a las víctimas de esta enfermedad. Consulte siempre a su médico.
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